«Una diferencia como el día y la noche»
Entretanto se han instalado los amortiguadores y he podido probarlos a fondo: ¡una diferencia del día a la noche! ¡Increíble!
Stefan W. de Hildesheim
Entretanto se han instalado los amortiguadores y he podido probarlos a fondo: ¡una diferencia del día a la noche! ¡Increíble!
Stefan W. de Hildesheim
«El último fin de semana: Mar del Norte, viento cruzado con medida de 65 km/h (8Bft) y el té se quedó en la taza – ¡¡¡Grande, los amortiguadores!!!»
Henning S. de Neumünster
«El taller español no entendía por qué me cambiaron los amortiguadores, pero cuando cambiaron los amortiguadores traseros se quedaron visiblemente sorprendidos por la diferencia con las antiguas BOMBAS DE AIRE que se habían montado….-)))))))) Espero poder hablar a muchos más campistas de sus fabulosos amortiguadores».
Markus S. de Luxemburgo
«Llevamos 15 años conduciendo un Niesmann Bischoff Flair 80001. Nuestros viajes eran siempre estresantes porque tenía que conducir el vehículo como si fuera un huevo crudo. Fuerte comportamiento de giro, fuerte balanceo y considerable sensibilidad a los vientos cruzados.
En los primeros metros desde el taller (tras la instalación de los amortiguadores Marquart) el coche se conducía de forma completamente diferente. La ruta habitual de vuelta a casa desde el taller trajo inmediatamente una revelación. Puntos de frenado significativamente más tardíos, mucha más estabilidad al girar en rotondas y cruces, etc.
El comentario del fabricante, el propio Sr. Marquart, de que después de la modificación se pueden pasar muchas curvas sin frenar, me pareció muy optimista, pero se produjo exactamente este efecto. Los camiones que se acercan ya no hacen sudar y los coches que pasan a más de 200 km/h por la autopista son, como mucho, aterradores por el ruido repentino que hacen.
Estoy muy satisfecho con la decisión y utilizaré mucho más el vehículo en el futuro. Todas las expectativas fueron claramente superadas. El hecho de que el fabricante no ofrezca esta configuración de fábrica es simplemente una negligencia.»
Ralf G. de Saarbrücken